*En la playa por W. Henry- Margetson
L´Eau sin más sería el nombre perfecto. Una marcada y enorme nota de bergamota, particularmente verde e incisiva, acompañada de un pomelo efervescente y un prístino nerolí crean un volumen de frescor batiente. Pero su base dulce y empolvada, suavemente cálida y con apenas un atisbo de almizcle y ámbar gris, reconduce el tema hacia un rincón intimista, como un retrato en acuarela del clásico espíritu guerlinesco.
L´Eau, pese a estar basado en el contraste de notas que caracteriza al mítico Shalimar y pese a llevar los apellidos de Parfum Initial, hace pensar mucho más en el espíritu de Jicky por su frescor seco casi salvaje. Sin embargo, mientras que un lenguaje aromático y animalístico muy complejo y matizado caracteriza Jicky, en el nuevo perfume de Guerlain el peso se reparte entre punzantes notas verdes que vuelven los cítricos más crudos y brutales y aterciopeladas notas avainilladas que dan profundidad y retienen la idea etérea de una piel joven que perfuma per se. El contraste y la búsqueda de algo singular une ambos perfumes, pero L´Eau tiene el acabado moderno que caracteriza estos tiempos, más centrado en lo concreto: la rotundidad de cada nota.
Propio del estilo de Thierry Wasser a la hora de componer perfumes es que cada capa aromática es muy densa y definida, pero además tiende a introducir en esa sólida urdimbre notas verdes particularmente penetrantes, algo que ya anticipó en Iris Ganache y que en L´Eau queda totalmente patente. Donde quizás ha trabajado los contrastes de un modo más agudo. Lo retro y lo contemporáneo enfrentados. Lo frío y lo cálido. Lo denso y lo etéreo. Lo amargo y lo dulce… y así continuamente. L´Eau se vuelve una propuesta carismática a través de ese continuo dualismo.
A nivel de estructura enfrenta dos grandes bloques: una salida hespéride muy tenaz y rica frente a una base vaporosa, seca, algo acaramelada y como elemento de transición sólo un velo empolvado de discreto iris especiado por el efecto de la freesia. Los cítricos no son delicados pese a su transparencia, sino explosivos, cortantes, acerados y muy definidos. Una marca de estilo contemporánea. Por eso, tendrás que adorar la bergamota por encima de todos los cítricos y aceptar la disonancia de notas hiperconcentradas versus notas livianas y empolvadas para que te guste L´Eau.
Como propuesta es interesante: va más allá de la reinterpretación ligera del Parfum Initial– pese a la filiación- porque retoma, en cierto modo, una idea de perfumería moderna donde se combina el particular interés de las Eaux Fraîches decimonónicas por mostrar un marcado carácter olfativo y recrea una sensación de vivacidad y contraste que tiene como modelo Jicky, pero con la intención contemporánea por mantener un acabado muy pulido, donde es el brillo y la saturación de las materias primas de calidad las que protagonizan la historia.
que ganas de probarla!!!! me da que a pesar de ser un agua no es apta para el verano, no?
Hola Pilar,
¿Apta para el verano? Depende de tus gustos personales.
Saludos,
Botanyuki.
Es delicioso para las noches frescas de verano.