La raíz indoeuropea ver se relaciona con el concepto de crecimiento, de ella derivan primavera, verano, verde o vergel a través del latín clásico. De viride viene verde que, en origen, ya tenía asociadas las ideas de lo fresco, lo lozano, lo floreciente.
Las plantas y algas se ven verdes porque contienen clorofila, un pigmento que les permite llevar a cabo la fotosíntesis, transformando energía solar y dióxido de carbono en energía química y oxígeno. Tiene una estructura química similar a la hemoglobina: un gran anillo con un átomo en el centro ( de magnesio en el caso de la clorofila, de hierro en el de la hemoglobina).
La primera asociación que se desprende del verde es la idea de naturaleza renovada en primavera y el aire limpio y fragante que se respira entonces, por eso también implica una idea de potencial. El verde mantiene una relación con la realidad concreta -al contrario que el amarillo– y simboliza la experiencia sensorial, tan tangible en la vegetación. También puede tener una connotación negativa: la espesura del bosque es lo ignoto, lo peligroso, lo siniestro.
Evoca sentimiento de esperanza e invita a la tranquilidad y la calma- tanto física como psicológica- ya que alivia la tensión de los vasos sanguíneos. También se le atribuye un efecto regulador de las funciones corporales, equilibrando el sistema nervioso autónomo. Es uno de los colores que mejor percibe el ojo humano, con un importante papel durante la evolución filogenética porque señalaba el grado de inmadurez de los frutos. En los niños la preferencia por este color refleja la autoestima, mientras que su rechazo señala ansiedad. Parece que la palabra clave para caracterizar este color es equilibrio.
Los atributos del verde a nivel psicológico siempre se asocian a una personalidad sociable y sensible pero en exceso implica sobreprotección, posesividad. El color de la juventud pero también el de la envidia. A nivel estético está situado en el centro del espectro y por eso es el color de la comparación, aunque resulta ligeramente frío al participar del azul (frío) y del amarillo (cálido-neutro).
En términos de sabor lleva asociadas las sensaciones de frescor y/o amargor . En términos de olor remite directamente al frescor astringente de la hierba recién cortada. En perfumería este grupo de notas suponen siempre un toque de calidad y elegancia: los grandes clásicos de la perfumería siempre incluyen elementos verdes, siendo el gálbano una de las notas más típicas. Vent Vert de Balmain significó en su momento un nuevo tipo de perfume completamente verde, orientado a espíritus más deportivos. Sin embargo, los perfumes que convierten el verde en tema son más una especialidad que un producto de atractivo general.
Las notas verdes tradicionales, esas que matizan con un toque de formalidad los perfumes, suelen ser notas sólidas e incluso agresivamente vegetales de gálbano, jacinto, hoja de violeta, petit grain o químicos aromáticos como la isobutil quinolina (Bandit de Robert Piguet) o cis-3-hexenal (Fidji de Guy Laroche). Sin embargo hay muchos matices de verde. La hoja de tomate que se hizo popular en los 70´s y Annick Goutal la usó en sus primeros perfumes de forma consistente es un ejemplo que aún mantiene ese sabor clásico algo resinoso. El trabajo de Jean-Claude Ellena para crear Eau Parfumée au Thé Vert es otro que además supuso una renovación importante en la gama de aromas botánicos. Lo que el perfume de Bulgari mostró es que lo verde también se puede renovar de muchas maneras. Así es, hay elementos verdes en notas florales como el jazmín o la mimosa, terrosos como el patchoulí, apimentados como el pimiento verde, aldehídicos como el cilantro… dibujando aromas de frutas verdes como la manzana sugerida por tagetes en Burberry Women o el toque acidulado del ruibarbo en Un Jardin Sur le Toit de Hermès; aroma de hojas verdes definidos por matices mentolados, alcanforados, coníferos; elementos muy aromáticos relacionados con hierbas olorosas de cocina como el romero, la albahaca; notas extremadamente frescas y ásperas como el jengibre puede ser en ocasiones.
La noción de naturaleza redolente de agua fue una renovación en los 90´s del tema verde a nivel más general: el tamiz de las notas acuáticas permitió introducir notas verdes transparentes como el bambú, la sandía, el pepino, el melón, el té verde. Estas notas más ligeras no sólo pueden dar dinamismo en las creaciones al simular una imagen de ondulante agua como hace el ciclamen, sino que también ayudan a que el perfume pueda tener un carácter menos concéntrico. Si una nota verde tradicional es el verde pasto de un rincón apartado, la nota diáfana moderna es más abstracta e invita más al viaje exótico, hasta las llanuras infinitas y fértiles donde el aire fresco es lo único que te rodea. Esa imagen panorámica está detrás de A Scent de Issey Miyake. Aún así, los perfumes verdes siguen siendo una opción más selectiva. La nota de savia en Traversée du Bosphore de L´Artisan Parfumeur es un ejemplo de verde moderno dentro del circuito alternativo, donde también los perfumes de higo comparten parte de este carácter renovador.
Pero en los últimos años, buscando un frescor impactante y muy duradero, una segunda renovación de las notas verdes ha tenido lugar. Tradicionales notas como la menta o el jengibre trabajadas de otra forma adquieren un nuevo cariz creando un efecto de hielo y de viento cortante (Roadster de Cartier). Pero son sobre todo los acordes inspirados en bebidas alcohólicas los que más han innovado; especialmente en las creaciones marcadas como fragancias masculinas donde las notas verdes mantienen un rol significativo para imprimir carácter en el perfume. Cosas como la anisada absenta en Douce Amére de Serge Lutens, A Taste of Heaven de Kilian -que también refresca el acorde de rosa en Body de Burberry siguiendo un concepto clásico de realzar la parte amarga de la rosa-, o el mentolado mojito en Guerlain Homme y en Cuba de Czech& Speake son algunos ejemplos de este nuevo acercamiento al verde.
He aquí otros perfumes con un importante carácter verde : Ninfeo Mio de Annick Goutal, Aqua Allegoria Herba Fresca de Guerlain, Green, Green, Green de Miller et Bertaux, Nº19 de Chanel, Green de Byredo, Bel Respiro de Chanel, Fou d¨Absinthe de L´Artisan Parfumeur, Diorissimo de Dior, Eau de Campagne de Sisley, Yerbamate de Lorenzo Villoresi, Balenciaga-Paris L´Essence, Lily de Crabtree & Evelyn, Menthe Fraiche de James Heeley o Green Irish Tweed de Creed.
Con un perfume verde y la versión que Loreena McKennitt hace de Brian´s Boru March os deseo un Feliz Día de San Patricio.
Hola, es interesante este verde recorrido de una nota tan importante en perfumería y ver que desde el punto de vista de su efecto : refrescante , tiene puntos de contacto con otras facetas como frutales y florales. Para mí y con el fín de abrir los conceptos sin amalgamar , lo verde siempre tiene algo de estridente que hace que todo lo que refresca no siempre es verde.
Con Vent Vert , pienso que al igual que a ocasión de Angel se creó la familia gourmand que antes era sólo faceta, se hubiera podido ,a partir de esa obra maestra, crear la familia verde ya que la faceta verde ocupa ahí toda la pirámide olfactiva.
Ah, no entendí lo de» deportivo » sobre Vent Vert, en un chipré femenino con clase de 1947, que contiene absoluto de rosa y jazmín.
Para acabar y decir algo sobre el tema anterior de las reformulaciones, pienso que al igual que se restauran y conservan las demás obras de arte, ciertos perfumes podrían ser rescatados y presentes en el mercado a pesar de contener la materia por la que se prohibe; idem que el tabaco que tiene muchísimo más tema sanitario.
Gracias por el artículo, un saludo.
Hola JM,
Seguramente Vent Vert no es el único de esas características aunque sí el más señalado porque fue algo diferente e innovador en su momento, de todos modos un grupo de perfumes verdes más modernos sí que existe pero se sigue viendo como una especialidad. Lo de perfume deportivo es algo que puedes encontrar como concepto en la propia publicidad que Balmain hacía del perfume cuando lo lanzó. Claro que no deberías de pensar en deportivo con los parámetros actuales, como has señalado se lanzó en los años cuarenta.
Saludos,
Botanyuki.
¡Hola Botanyuki!
No sé dónde ubicar este comentario y creo que aquí, por la temática, puede encajar. ¿Has visto el nuevo aroma de Roger&Gallet? Fleur de Figuier se llama y es delicioso. Creación de Francis Kurkdjian, consta de la gama completa de gel, leche corporal y jabones. Lo probé el otro día en una farmacia y me chifló (el aroma de higo es de los que más me gustan en primavera-verano) además, en contra de lo que ocurre con otros productos de esta firma, goza de una fijación bastante buena. Yo ya me he hecho con la colonia y la leche hidratante. Creo que para esta época del año es algo que puede ir bastante bien. Simplemente lo dejo aquí por si alguien no lo conocía.
Un saludo,
Oliva.
Hola Oliva,
Gracias por informar. Lo tenía fichado para un sniffathon pero aún no lo he probado, veo que promete :).
Saludos,
Botanyuki.